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A solo una hora y veinte minutos de Florencia, se encuentra Lucca, una de las joyas más encantadoras de la Toscana. Esta ciudad amurallada, repleta de historia, arte y cultura, alberga tesoros inigualables listos para ser descubiertos. Aunque se necesitarían varios días para explorarla en profundidad y captar su esencia única, un día en Lucca entre arte, gastronomía y paseos será suficiente para brindarte un vistazo de la ciudad y apreciar su encanto.
Conocida como la ciudad de las 100 iglesias, Lucca conserva una gran colección de templos religiosos. Muchas de estas iglesias pertenecen a diferentes periodos que van desde renacentistas, medievales, góticos y romanos. Estas se pueden encontrar en cada rincón del centro histórico, por lo que visitarlas puede sumar en tu enriquecedora experiencia por la ciudad.
Más allá de sus monumentos y atractivos, Lucca destaca por sus eventos culturales, de gran relevancia no solo para la Toscana sino para toda Italia y el mundo. Entre estos eventos se encuentran el Lucca Summer Festival, un prestigioso festival de música de verano que atrae a importantes artistas nacionales e internacionales, y el Lucca Comics & Games, uno de los festivales de cómics más importantes del mundo, que se celebra entre octubre y noviembre.
Explorando el Arte en Lucca
Lucca es una ciudad de arte por excelencia en la Toscana, y este se manifiesta en todas sus dimensiones. Lo encontrarás en las pinturas y esculturas de sus principales museos, galerías y pinacotecas; en la música, ya que esta ciudad fue hogar de grandes compositores como Giacomo Puccini, Luigi Boccherini, Francesco Geminiani y Alfredo Catalani; y en los estilos arquitectónicos que se pueden apreciar en todas sus iglesias y palacios.
Algunos de los lugares más relevantes que debes agregar en tu itinerario de un día en Lucca para apreciar el arte que brinda la ciudad son los museos nacionales Palazzo Mansi y Villa Guinigi. Estos museos albergan una vasta colección de esculturas que a la vez muestran a profundidad la historia de Lucca. En el caso de Palazzo Mansi, este cuenta con una importante pinacoteca con obras de pintores relevantes como Tintoretto y Gioacchino Assereto. De igual forma, no dejes de visitar la Catedral San Martino, donde se encuentra el Volto Santo, un crucifijo medieval que, según se cuenta, fue esculpido por Nicodemo, uno de los que depositó a Jesús en su sepulcro.
Degustando la Gastronomía Local
Lucca, con su estratégica ubicación entre el mar, colinas y montañas, alberga una rica y diversa tradición gastronómica. La cocina Lucchese se distingue por su variedad de platos reconfortantes y sabores basados en los peces de la costa de la Versilia, las frutas, carnes, granos y hortalizas de sus bosques y montañas en la Garfagnana, y sus vinos y apreciado aceite de oliva de las colinas de Montecarlo. Estas combinaciones dan como resultado platos deliciosos y únicos.
Platos típicos
Algunos de los platos típicos que encontramos son los Tordelli Lucchesi, una pasta fresca rellena de la combinación perfecta de carnes de cerdo y res, pan, perejil y especias, servida con un ragú de carne y queso parmesano; la Zuppa Frantoiana, una sopa de verduras que se prepara principalmente en invierno, caracterizada por el intenso sabor del aceite de oliva que se le agrega en el plato; la Garmugia de primavera, como su nombre lo indica, es una sopa preparada con las primeras verduras de la primavera, como las judías verdes, los espárragos, habas desgranadas y carne de ternera picada. Además, está el Matuffi, un plato a base de polenta servido con un ragú de carne o una salsa de hongos porcinos, uno de los ingredientes más preciados de la provincia de Lucca.
Entre los restaurantes ideales para degustar la típica cocina de Lucca y sus vinos durante tu paseo por la ciudad se encuentran La Buca di Sant’Antonio, un establecimiento histórico conocido por la alta calidad de sus ingredientes y su ambiente que evoca historia y tradición; la Trattoria Da Giulio, uno de los restaurantes más amados por los locales debido a sus sabores caseros, su servicio acogedor y su excelente relación calidad-precio; y el Ristorante Mecenate, que destaca por ofrecer platos que reflejan el amor por el territorio y la calidad de sus ingredientes provenientes de pequeños productores.
Descubriendo los Mejores Aperitivos en Lucca
A partir de mediados de la primavera, cuando comienzan los días cálidos, las terrazas de los bares de Lucca se llenan por las tardes. Todos disfrutan de spritz, espumantes, cervezas y otras bebidas, usualmente acompañadas de tapas. Las áreas favoritas para reunirse con amigos para el aperitivo son el Corso Garibaldi y las principales plazas de la ciudad: Piazza San Michele, Piazza del Anfiteatro, Piazza Napoleone y Piazza San Frediano.
Entre los mejores lugares para disfrutar del aperitivo en Lucca, con ambientes más acogedores y exclusivos, se encuentran Vinarka della Pavona, Magellano Cocktail Bar, Caffè Biscotteria Santa Zita, Enoteca Vanni, Al Bacaro del Collegio y Ristorante Cocktail Bar San Colombano.
Paseos Especiales por la Ciudad
Un placentero paseo por las calles de Lucca te invitará a descubrir maravillas que te cautivarán y te harán desear volver una y otra vez. Desde sus animadas plazas, como la Piazza del Anfiteatro, con su peculiar forma ovalada que recuerda su antiguo esplendor como teatro romano; la encantadora Piazza Napoleone, apreciada por los lugareños y rodeada de majestuosos palacios como el Palazzo Ducale; hasta la pintoresca Piazza San Michele, con su singular iglesia presidiendo el centro.
Otro recorrido que no puedes perderte, especialmente si disfrutas de las compras, es por la Via Fillungo, donde encontrarás una variedad de tiendas que ofrecen desde moda y accesorios hasta zapaterías y lencerías. Al desviarte por Via Sant’Andrea, una de las callecitas adyacentes, descubrirás una auténtica joya como es la Torre Guinigi, una torre medieval que se distingue por sus arboles en la cima.
Sin duda, uno de los mayores encantos de Lucca son sus imponentes murallas renacentistas, que se mantienen intactas y han sido convertidas en un parque que abarca alrededor de 4 kilómetros. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de paseos serenos en un entorno natural, contemplando hermosas vistas de la ciudad. Es común ver a personas haciendo ejercicio, paseando en bicicleta, o simplemente relajándose en los bancos con un buen libro, sumergidos en este ambiente único.